¿Discapacidad? ¡No para navegar!

Eduardo Valenzuela Elizondo

Periodista CENAREC

Un grupo de costarricenses visitó la tarde de este jueves el SV Tenacius mientras se encontraba en el Muelle Turístico de Puntarenas

Un grupo de costarricenses visitó la tarde de este jueves el SV Tenacius mientras se encontraba en el Muelle Turístico de Puntarenas

Guadalupe, San José. 19 de febrero de 2016 – Este jueves, en el hermoso muelle turístico de Puntarenas, tuvimos la oportunidad de subir a bordo del SV Tenacious, uno de los dos únicos barcos accesibles para personas con discapacidad en el mundo. Actualmente se encuentra en Costa Rica para hacer un recorrido por las aguas del país y entrenar en los muy particulares oficios marítimos a varios costarricenses.

Con una capacidad máxima de 51 personas y 65 metros de largo, este velero inglés  fue construido en el año 2000 por la Organización No Gubernamental Jubilee Sailing Trust. Declarado en 2006 la nave de madera más larga aún a flote, fue reconocido también como el bote de madera más largo construido en los últimos cien años en el Reino Unido; pero esta no es la principal característica de esta hermosa embarcación: está diseñada para que cualquier persona con cualquier condición de discapacidad pueda ser parte de la tripulación en total equidad.

Natalia Vindas es una de las afortunadas que estará en el velero por cuatro días, antes de que tome rumbo a Tahití, pero por más encantador que suene, no será un viaje meramente de placer; todas las personas que se embarcan en el Tenacious forman parte de la tripulación y se les instruye en las normas de seguridad, aprenden sobre navegación y deben asumir una serie de tareas para que la nave llegue a buen puerto, entre ellas: colaborar en la cocina, atención de invitados, limpiar la cubierta y apoyar a los oficiales entre otros.

Por donde quiera que se vea, este barco es inclusivo, desde su capitana, pasando por toda la diversidad de la tripulación, hasta los elementos de accesibilidad. Esta fue la idea con la que fue creado, permitir que personas en condición de discapacidad accedieran a una aventura única y poder desenvolver en condiciones de igualdad y equidad.

La tripulación tiene un equipo permanente y el resto son voluntarios seleccionados en parejas, donde siempre uno de los dos debe tener alguna discapacidad, para aprender el uno del otro y apoyarse mutuamente.

La nave cuenta con ascensores, anclajes para sillas de ruedas en cubierta, cabinas y baños totalmente adaptados, cocina accesible, incluso un sistema de poleas para que una persona usuaria de silla de ruedas pueda subir a lo más alto a trabajar con las velas. Como indicó Hywel, un médico que hace su tercer viaje a bordo del Tenacious: “La persona puede tener discapacidad en tierra, pero aquí lo que tiene es capacidad para navegar”.

Si usted desea ser parte de esta aventura, puede obtener mayor información en el sitio web de Jubilee Sailing Trust haciendo clic AQUÍ.

Para ver una galería fotográfica del SV Tenacius durante su estancia en Costa Rica, haga clic AQUÍ